Es el enemigo de su enemigo un amigo... ¿o una bestia?
Lord Ashworth está marcado por una noche de terror hace años que dejó su rostro arruinado y su vida hecha pedazos. Él se esconde en la Mansión Silverstone, utilizando los rumores que lo definen como un monstruo y horrible asesino para mantener a los visitantes a distancia. Sin embargo, no puede evitar la sensación de que los rumores podrían ser ciertos. Se dice a sí mismo que es mejor así. Si sus recuerdos resurgen alguna vez, al menos, él será el único perjudicado por ellos.
Sin embargo, la mujer que está en su puerta se niega a temerle. Eso no sólo es una rareza, sino también una amenaza para su secreto... y su corazón.
Vivian Suttley ha visto la cara del mal más de una vez en su joven vida. Está huyendo del último, un hombre cruel decidido a obligarla a casarse con él. Sean cuales sean los rumores sobre el recluido Ashworth, seguramente no es nada comparado con el futuro sombrío y violento que deja atrás.
Ashworth ya la salvó una vez, y él es su última esperanza de refugio. No obstante, ella se pregunta si está realmente más segura en Silverstone, o si acaba de cometer el mayor error de su vida.
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